Prioridades del próximo paquete de medidas de recuperación de la Comisión Europea

La Comisión Europea prepara un paquete de medidas de recuperación económica de Europa. Hasta ahora, el debate político se ha centrado en la facilidad de préstamos que permitan a los Estados miembros endeudarse para hacer las inversiones necesarias que palíen las consecuencias del COVID-19 y permitan una recuperación rápida de la economía y del empleo a través de instrumentos financieros acordados por los líderes políticos en abril: el programa SURE, los medios financieros puestos a disposición por el Banco Europeo de Inversiones y el Mecanismo Europeo de Estabilidad.

Sin embargo, junto con esta facilidad para el acceso al crédito, progresivamente se abre la posibilidad de que se incremente el presupuesto propio con el que contará la Unión Europea para el período 2021-2021, cuyo techo se había fijado en las negociaciones previas en el 1% del Producto Nacional Bruto de los Estados Miembros. Esto significa, en la práctica, que los actuales borradores de Reglamentos de los Fondos Estructurales y de Inversión – que estaban en negociación y previsiblemente se aprobarán en los próximos meses – podrían sufrir algunos cambios; al mismo tiempo, el Marco Financiero Plurianual (MFP) 2021-2027 posiblemente será incrementado.

Los Fondos de Recuperación se canalizarán simultáneamente a través el MFP y los Instrumentos Financieros y el gasto se repartirá en tres Pilares:

• El Primer Pilar, que es en el que se gastarán la mayoría de los fondos, se centrará en ayudar a los Estados miembros a recuperarse, reparar los daños sufridos y salir reforzados de la crisis. Financiará inversiones y las reformas públicas orientadas a la doble transición que necesita Europa: una Europa climáticamente neutra y una Europa digitalizada; esta transición ha de ser resiliente. Estas decisiones se tomarán en el marco del Semestre Europeo. La buena noticia para España es que estos fondos se centrarán en aquellas partes de Europa más afectadas por la pandemia, como es el caso de España y que habrá una asignación complementaria de fondos de cohesión, que se asignará en función de la gravedad del impacto económico y social de la crisis. Además, se agilizarán los fondos para que se gasten preferentemente en los próximos años.
• El Segundo Pilar tiene por objetivo reactivar la economía y ayudar a la inversión privada a retomar el impulso en sectores clave como la tecnología 5G a la inteligencia artificial, el hidrógeno limpio y las energías renovables marinas. Como novedad, se creará un Instrumento de Inversión Estratégica que ayudará a invertir en las cadenas de valores clave, que son cruciales para la resiliencia futura y la autonomía estratégica, por ejemplo, el sector farmacéutico. También se propondrá un nuevo instrumento de solvencia para las empresas que ayude a su recapitalización.
• El Tercer Pilar se centrará en reforzar aquellos programas que aportan valor y conocimientos como es el caso de rescEU u Horizonte Europa. También se creará un nuevo Programa de Salud.

En resumen, la Comisión Europea propone salir de la crisis creando una economía moderna, limpia y saludable, que garantice a la siguiente generación las condiciones para una calidad de vida, porque tarde a temprano se encontrará una vacuna contra el COVID-19, pero no se encontrará una vacuna contra el cambio climático. España, que será uno de los países que tendrá más facilidades para acceder a estos fondos, ha de aprovechar la oportunidad en línea con las prioridades que se proponen.