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¿Cómo deben las entidades sociales prepararse para recibir Fondos Europeos?
Las entidades sin ánimo de lucro se pueden beneficiar de un amplio abanico de fondos y ayudas provenientes de la Unión Europea. Destacan tres tipos de fondos:
- Fondos Estructurales o de Inversión, que son a siete años vista y se encuentran en el período de programación 2021 – 2027,
- los Programas Comunitarios, por los que se recibe menor cuantía y son temáticos y más específicos,
- y los Fondos Next Generation, que se impulsan como vía de recuperación tras la pandemia.
En muchos casos, el desconocimiento o la falta de información sobre cómo funcionan los mecanismos de acceso y gestión de estos fondos pueden provocar una falta de motivación o una aproximación errónea a las oportunidades de financiación europeas. Por ello, os hacemos una serie de recomendaciones sobre cómo afrontar y aprovechar los caminos que los fondos europeos pueden brindar a las entidades del Tercer Sector.
En primer lugar, es importante comprender las necesidades sociales que los fondos nos van a ayudar a paliar, pues éstas deben estar perfectamente alineadas con las políticas y prioridades de la Unión Europea. Por ejemplo, durante un ciclo de talleres desarrollado junto al Observatorio de la Realidad Social de Navarra, un grupo de entidades sociales detectaron diferentes necesidades en los territorios: necesidades sociales, económicas o tecnológicas entre las que se encuentran la sostenibilidad de las entidades o la necesidad de digitalización.
En la misma línea, es importante tener en cuenta las motivaciones que impulsan en el camino de la entidad hacia los fondos europeos, pues sería un error que éstas fueran exclusivamente económicas. Así, por ejemplo, las entidades sociales participantes en el ciclo de talleres antes mencionado hicieron referencia a que la internacionalización y conexión con Europa permitiría a sus entidades conocer otras instituciones y redes que tienen retos en común a nivel nacional y europeo. Gracias a ello, podrían, a su vez, detectar nuevos objetivos de mejora, pero también desarrollar nuevas alianzas y reforzar la colaboración público-privada lo que permitirá mejorar la intervención con las personas y pilotar nuevos métodos de intervención.
También el aprendizaje e intercambio de conocimientos pueden ser una motivación de peso a la hora de mirar hacia Europa: buscar nuevos conocimientos sobre cómo abordar determinadas situaciones y necesidades o como mejorar los servicios de atención a las personas.
Además, la financiación europea puede abrir vías para invertir en temas a veces poco accesibles para entidades sociales, por ejemplo, la sostenibilidad o la I+D.
En el inicio de este camino, es importante, pues, dar más importancia a la innovación y las experiencias que a la financiación. En el taller de Navarra, las entidades expresaron esta idea con algunas frases muy ilustrativas:
- Ilusión, motivación y en alguna ocasión, inversión.
- “Mirar hacia dentro y después hacia fuera”. Por ejemplo, “dar un paso al frente con los idiomas”.
- Seguimiento de la agenda política europea y participación.
- Conectar nuestros retos con las corrientes europeas e internacionales.
- Atreverse con el Servicio del Voluntariado Europeo.
Sin embargo, como todos los proyectos, la gestión de los fondos europeos tiene ventajas y desventajas. Conocerlas antes de acercarse a la financiación europea es importante y puede ayudar a tomar mejores decisiones. Entre las ventajas destacan la posibilidad de desarrollar nuevos métodos de intervención, la visibilidad a nivel europeo o la mejora de nuestros programas. Sin embargo, también podemos encontramos complicaciones para hallar socios idóneos, mucha competencia en las convocatorias o barreras de tipo lingüísticas o flexibilidad para viajar.
Una vez tomada la decisión e iniciado el proceso, hay algunos factores y claves en el uso de fondos europeos que permitirán a las entidades sociales asegurar el éxito de sus proyectos. Estas están diferenciadas en tres ámbitos:
Relación con las administraciones públicas
Involucrar y promover una participación y relación constante con las administraciones, por ejemplo:
- Promover que alguna administración pública se implique en nuestro proyecto como socio o como entidad asociada, mostrando su compromiso a través de una carta de apoyo .
- Mostrar a las administraciones la importancia que puede tener para ellas su implicación, destacando que se va a abordar un reto común o compartido.
- Compartir con las administraciones públicas clave las experiencias de éxito que estamos descubriendo para mostrarles que otras formas son posibles y están siendo eficaces para solucionar un problema común.
- Acercar o implicar a las administraciones públicas en estos proyectos nos facilitará espacios para influir en la mejora de las políticas y los servicios.
- Implicar o contar con la participación de redes y plataformas para aprovechar el conocimiento generado para reforzar el diálogo y la interlocución con las administraciones públicas.
Equipo
Hacer una buena gestión interna de los proyectos con financiación europea hacia los recursos humanos de las organizaciones. Por ejemplo:
- Implicar todo lo posible al conjunto de la organización.
- Identificar y desarrollar el talento interno.
- Promover el impulso del conocimiento europeo en el resto de la organización.
Colaboración de otros agentes y entidades, por ejemplo:
- Identificar y participar en las redes europeas alineadas con nuestros intereses.
- Dedicar tiempo al networking.
- Identificar aliados a nivel nacional.
- Promover la colaboración entre entidades de distintos niveles.
Experiencias inspiradoras de otras entidades
Finalmente, traemos dos ejemplos de ONG que tienen una amplia trayectoria en la gestión de fondos europeos. A través de su experiencia, esperamos que puedas obtener inspiración y algún aprendizaje si estás orientando tu mirada hacia Europa.
Es una organización socio-sanitaria que se dedica a acompañar a las personas con enfermedad mental, deterioro cognitivo u otras capacidades en la recuperación de su proyecto de vida, limitado por la pérdida de autonomía.
Esta fundación se creó en el año 1994 con la intención de desarrollar un software de rehabilitación cognitiva a través de pantalla táctil. Este objetivo inicial se combinaba con el comienzo del trabajo de inserción laboral de personas con discapacidad por enfermedad en Castilla y León. Los dos objetivos fueron abordados por proyectos europeos, por lo que desde sus inicios se apoyaron en Fondos Comunitarios.
En este proceso, la organización encontró dificultades como, por ejemplo, exceso de burocracia, manejo de idiomas o escasa implicación de actores locales, regionales y nacionales. Como ventajas destaca el aprendizaje, la financiación y la generación de una mente más abierta en la organización.
Fundación Tutelar de les Comarques Gironines
Actualmente se le conoce como Support – Girona, aunque sigue manteniendo el nombre oficial de Fundación Tutelar de les Comarques Gironines. Su función es la de ejercer cargos tutelares por designación judicial respecto a personas “incapacitadas legalmente”, principalmente, por razón de enfermedad mental, discapacidad intelectual o enfermedades cognitivas.
La pertenencia a distintas organizaciones internacionales y la participación en proyectos europeos le ha ido generando resultados innovadores que han facilitado sus modelos de apoyo.
También han encontrado distintas dificultades para liderar o participar en proyectos de fondos europeos, como puede ser la dificultad del manejo de los marcos conceptuales europeos sobre política, la burocracia y la búsqueda de acciones innovadoras. Por otro lado, como claves del éxito destacan el cambio en la forma de trabajar, el activismo sobre los derechos humanos y la generosidad desde el ámbito de los recursos.
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